Raices del agua





Carmen Martin Gaite hablaba de alimentarse únicamente del hambre de vivir propia, por más que ésta se sienta decaída por momentos. Pero de ese hambre el consciente nada sabe. 
Hay que enamorarse del propio inconsciente, ese es el camino del amor, el único capaz de alimentar el hambre de vivir (pan de vida de salvación). Lo contrario es gozar con el sufrimiento, y de eso está el mundo lleno, por desgracia.