Piedra viva

El sentido interior es necesidad de unión, de metaforización, de comprensión, de transformación.
Y la metáfora es la responsable de que un sistema de signos finito, el lenguaje, pueda dar cuenta de un conjunto de cosas infinitas, el universo.
Piedra viva, Luz del mundo, Sal de la tierra, Verbo de Dios, Logos, Camino, Verdad y Vida.

La sal de la alianza

"te lo doy a tí, a tus hijos y a tus hijas contigo, en estatuto perpetuo; es pacto de sal perpetuo, ante Yavéh contigo y con toda tu descendencia" (Numeros 18, 19)

“¿No sabeis vosotros que Yavéh, Dios de Israel, dió a David el reino de Israel para siempre a él y a sus hijos en pacto de sal?" (Paralipómenos II 13, 5).

La sal es también la única roca consumida por el ser humano.

4 Acercándoos a él, piedra viva, rechazada ciertamente por los hombres, pero elegida y preciosa ante Dios,

5 vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como una casa espiritual, y un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales, agradables a Dios por medio de Jesucristo.

6Por lo cual también contiene la Escritura:
He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa;
y el que crea en él, no será avergonzado.

7Él es, pues, honor a vosotros los que creéis; pero para los adesobedientes,
la piedra que los edificadores bdesecharon,
esta ha venido a ser la cabeza del ángulo,

8 y piedra de tropiezo y roca de escándalo para aquellos que, siendo desobedientes, tropiezan en la palabra, para lo cual fueron también señalados.

 (Pedro 2:4-12) 

 

Triunfo Hermetico por Limojon de Saint Disdier, siglo XVII. 


"El enlace místico entre el sol y la luna es un proceso esencial de la alquimia y aparece en la Concepción del Unicornio de Fuchs, alegoría de la Inmaculada Concepción (el unicornio representaba el principio femenino, el recipiente, relacionado con la luna como el león con el sol; también representaba el bien perfecto). La unión alquímica del sol y la luna coincide con el nacimiento del fénix, que triunfa sobre el tiempo. En el Parzival, el más alquímico de los textos del grial, se dice expresamente que el poder del Grial permite al fénix vivir de nuevo; los alquimistas creían que la lapis philosophorum podía, como el Grial, curar todas las enfermedades y proporcionar vida y juventud eternas a quien los poseyera."

"La iconografía de la Purísima o Inmaculada Concepción es una de las más complejas. Inicialmente se insistía en la función esencial de la Virgen en la genealogía de Cristo, representada en el árbol de Jesé, tema iconográfico que aparece en los siglos XI y XII, y se desarrolla en las portadas de las catedrales góticas francesas. También se utilizaba para ello la escena del casto encuentro entre San Joaquín y Santa Ana ante la Puerta Dorada de Jerusalén y la Santa Ana Triple (Santa Ana, madre de la Virgen, como trono de ésta, y ésta del Niño Jesús). Incluso una escena de más oculto simbolismo, como es la alegoría de la caza del unicornio, que ya había sido utilizada por San Isidoro de Sevilla para explicar la relación de Cristo con la Virgen María.

Santa Ana triple en la catedral de Ourense


La Dame à la Licorne: A mon seul désir (finales del siglo XV) - Detalle
Técnica: tapicería / Medidas: 370 x 460 cm
Museo de Cluny, París.   

Inmaculada Concepción
JUAN DE JUANES (BOCAIRENT, VALENCIA, 1579)
Dos filacterias grandes flanquean a la Virgen con la leyenda «TOTA PVLCHRA ES AMICA MEA / ET MACVULA NON EST IN TE», recogida en el Cantar de los Cantares. Rodean a la figura mariana los símbolos de la letanía lauretana: el sol, el ciprés, la puerta, la vara de Jesé, el pozo, el rosal, el olivo, el jardín, la luna, la estrella, la ciudad, la palmera, el espejo, la torre, el lirio, el cedro y la fuente.

En la Edad Media, a finales del siglo XV, la Virgen Inmaculada se representaba enviada por Dios desde el cielo, descendiendo a la tierra. De pie, sobre la luna, coronada de estrellas, extendía los brazos o unía los brazos sobre el pecho. La fuente de esta representación estaba en el Cantar de los Cantares y en el Apocalipsis. En primer lugar, la Inmaculada está asimilada a la novia del Cantar de los Cantares, Tota pulchra, cuyas metáforas bíblicas fueron popularizadas por las Letanías lauretanas: el sol, la luna, la estrella del mar, el jardín cerrado, la fuente, el pozo de agua viva, el cedro del Líbano, el olivo, la rosa, el espejo sin mancha, la Torre de David, la Ciudad de Dios, la puerta del cielo. Otros atributos fueron tomados del Apocalipsis: la Virgen vestida de sol con la luna bajo los pies, representada en forma de creciente, evocando la castidad y la victoria de la Cruz sobre otras religiones."


Grabado de Pedro de Villafranca, de la Inmaculada Concepción 


Virgen de Guadalupe en el Museo del Prado


Virgen de Guadalupe en la Iglesia de Santa María del Mar,Barcelona