Ciclo-génesis







Cualidad es el nombre que María Zambrano da a aquello que por no ser no tiene nombre, por ello le parece inadecuadamente racionalista darle esta denominación, pero sin embargo considera que nos puede sugerir aquel aspecto de lo que nos rodea con el que contactamos de una forma no racional. La cualidad es una pura presencia que se nos hace visible sin fundamento "parece estar rodeada de un abismo".
El racionalismo, convencido de que la realidad tiene una estructura racional, adopta una perspectiva limitada y selectiva ya que es ajeno a cualquier manifestación que no encaje en esta convicción. De este modo empobrece el mundo y el trato del hombre con él. Las consecuencias son de gran trascendencia porque no sólo determinan la cantidad y calidad de realidad con la que puede entrar en relación sino la raiz metafísica de la vida humana: su modo de inserción en el universo.

Y el ser humano, en tanto ser real, encuentra en él mismo que la absoluta racionalidad de lo real, la identificación sujeto-objeto, es irrealizable viviendo, y es que hay un fondo insobornable a la razón, un fondo último del vivir que María Zambrano llama "entrañas" donde se encuentran todas las formas del sentir. En él se siente instante a instante el pasar de la vida; es un "padecer" que constituye lo más íntimo: se padece porque se está vivo o se está vivo porque se padece. Se siente sin interrupción por el simple hecho de estar vivo.
Este sentimiento profundo no puede ser reducido a razón, y lo que se siente es lo que no es, lo otro, lo heterogéneo, lo cualitativo, lo que no se puede nombrar porque "Sólo se puede decir lo que de algún modo es". En los tiempos en los que se pretende un saber absoluto, todo esto, lo que no es nombrado, queda disuelto.

Este sentimiento profundo no puede ser reducido a razón, y lo que se siente es lo que no es, lo otro, lo heterogéneo, lo cualitativo, lo que no se puede nombrar porque "Sólo se puede decir lo que de algún modo es". En los tiempos en los que se pretende un saber absoluto, todo esto, lo que no es nombrado, queda disuelto.

María José Clavo Sebastián
'María Zambrano: el tiempo y su articulación con otros conceptos'